miércoles, 5 de septiembre de 2012

Dejamos atrás.

Nuestra vida ha discurrido entre las calles de una ciudad. Desde pequeños hemos sido amigos y nos hemos enfadado y vuelto a reconciliar. Hemos jugado en el parque de abajo de nuestra casa con cualquier vecino, y lo bien que nos lo pasábamos. Poco a poco hemos ido creciendo y subiendo de cursos académicos. Hemos seguido nuestros instintos y llevamos con nosotros a todos esos amigos con los que jugábamos y reíamos en clase. Nosotros medíamos la edad conforme a la puerta del colegio por la que entrábamos, y cuando llegamos a la más grande y éramos los mayores del "cole", nos pusieron otra meta: el instituto. Pasamos casi todos al mismo, dejando atrás amistades, aunque forjamos otras en el "nuevo". Pasito a pasito pasamos de que pesase más la mochila que nosotros, a poder llevarla con nosotros. Y subiendo y bajando escaleras pasaron nuestros primeros años allí. Curso a curso y las mismas caras veíamos cada día, ya nos acostumbramos a ello. Queríamos empezar otra vez solo por lo bien que nos lo pasábamos en clase con todos ellos. Pero empezaron los cursos duros, los que ya había que estudiar y no se podía dejar todo para el último día (aunque reconozcamos que lo hemos hecho hasta este último y lo seguiremos haciendo). Nos hicimos mayores, y eso lo notábamos ya en que habíamos crecido: nosotras unas señoritas y ellos una voz un tanto rara que nos costaba reconocer. Y así pasó nuestra infancia y adolescencia; entre risas y carcajadas, entre juegos y pintadas en la pizarra. Y ahora llega lo de decir adiós; lo de dejar atrás aquella vida para sumergirnos en otra etapa. Alguno nos costará más que a otros, pues algunos dejamos estas calles para intentar sobrevivir en un mundo aparte.
Mucha suerte a todos y que os vaya muy requetebién. 
Será raro volver a empezar y sin vosotros.

viernes, 3 de agosto de 2012

Fiarse y desconfiar.



Amanece, y todo parece perfecto, hasta que te das cuenta de que las personas cambian a lo largo de los días.
Parece que puedes confiar en alguien, que puedes acercarte a ella, pero cuando menos te lo esperas  te da una puñalada por la espalda.
Parece mentira que no aprendamos de nuestros errores, porque estamos tan cegados y pensamos que todo lo hacemos bien que hasta que no pasa algo importante no pensamos en ello otra vez.


miércoles, 28 de marzo de 2012

Esa impotencia de querer controlarlo y no poder.

Ese momento en el que no puedes más, que la situación no la puedes controlar, que no es que se te haya ido de las manos, es que por mucho que has hecho sigue y sigue sin remedio, sin pararse a mirar. Simplemente pasa y estamos a estas alturas en las que no sé que hacer. Simplemente cada vez que lo diviso, que lo pienso, me pregunto si tendrá solución, si todo esto se va a arreglar y todo volverá a ser como antes. Me pregunto si podría haber hecho algo más, Me pregunto si ha sido mi culpa, no creo; pero una cosa tengo clara, que no puedo más, que no quiero rendirme, no quiero tirar la toalla, pero siento una gran impotencia porque no está en mis manos y me supera el ver que todo pasa de mal en peor y tener que dejarlo ir.

martes, 27 de marzo de 2012

Que las nubes escribirán lo que yo no alcanzo a vocalizar.

Que quieres que diga, que hable, que chille, si cada palabra que sale de mi boca antes ha estado en mi mente y en mi mente habitas tú; tú y todos los momentos que estás a mi lado, todas las palabras que me dices, todas las canciones compartidas. Que quieres que te pinte si lo único que me sale del boli son corazones igual que una niña pequeña. Que quieres que cante si las letras de las canciones me remiten a ti, a tu voz susurrante. Que quieres que sienta cuando te miro a los ojos y veo sinceridad, cuando miro esa sonrisa y veo un beso, cuando me asomo por tu corazón y veo que tus latidos ya tienen nombre.

Los sueños.

Los sueños. Eso que se despierta cuando nos dormimos. Eso que se demuestran cosas que nosotros solo sabemos. Es curioso que lo olvidemos a los cinco minutos, porque hay alguno especialmente bonito. Dicen que es una representación de nuestro propio mundo mezclado con algo de experiencia.
Yo creo que es nuestra forma de escapar de esta sociedad en la que vivimos a contrarreloj; de este mundo que no nos deja liberarnos de lo que queremos; que no nos deja expresarnos como queremos porque hay cosas que no se expresan con palabras, y en nuestra mente y en nuestra imaginación las hacemos posibles y damos rienda suelta a nuestros pensamientos, a nuestros sentimientos.
Pero hay otra clase de sueños, aquellas metas que nos ponemos nosotros, aquellos que queremos llegar a hacer o simplemente llegar a ser aquello que para nosotros significa algo especial. Esos son la clase de sueños por los que hay que luchar. Porque ninguna causa está perdida, si hay alguien que luchar por ella, porque si no eres feliz, luchar por ello, porque todavía no ha llegado el final de tu cuento.

lunes, 13 de febrero de 2012

El amor no tiene día. Simplemente se vive.

14 de febrero. ¿Porqué tener solo un día para decir TE QUIERO? Las cosas no se demuestran hablando, sino haciendo; pues cuando las haces ellas hablan por sí solas. No entiendo porqué en este mundo necesitas cada vez más y más. Con las pequeñas cosas del día a día yo me conformo. Me quedo con los detalles que para todo el mundo son insignificantes e invisibles.

miércoles, 8 de febrero de 2012

El mundo está loco.

Qué sí! Qué no! Que el mundo está lleno de dudas, pero una cosa está clara: que el amor no tiene rival. La sensación producida por otra persona dentro de tí, que despierta emociones nunca antes vividas, que con una simple mirada se pueden expresar todos los pensamientos, que simplemente el mero hecho de pensar en esa persona te haga sonreír de oreja a oreja, que en días donde todo es gris y negro esa persona pinte encima con todos los colores del arco iris dibujando un mundo en el que solamente tú y él tengais acceso.

lunes, 23 de enero de 2012

La mejor forma de hablar no necesita palabras.

Puedo sentir ese latente corazón encerrado en tu pecho. La sensación producida por el roce de tus labios con los míos. La forma que tienes de acariciarme, de calmarme, de enseñarme que las cosas nunca salen como se quiere, pero también que las cosas podemos hacerlas a nuestra manera. Tu mirada tan intensa que me hace temblar desde dentro, pero que a la vez me tranquiliza y me hipnotiza. La sonrisa que no se borra de tu cara y que me encanta ver y dejarme llevar por ella una y otra, y otra vez... Demasiadas palabras que apenas dicen nada, porque las palabras se las lleva el viento; pero los sentimientos no, esos permanecen en mi corazón, cerrados con una cerradura de la que solo tú posees la llave.

jueves, 19 de enero de 2012

Todo está mal y aún así hay que seguir.

Son días en los que todo va mal. Que todo se torna del revés y lo ves boca abajo. Puede que lo estés mirando todo de un modo diferente, o verdaderamente son todos los demás los que no van contigo. Que te encuentras solo en un camino que no sabes seguir, en el que necesitas algo que te haga seguir. Días en los que te planteas todo, que no sabes nada. Momentos en los que parece que estás rodando montaña abajo, justo la montaña que acababas de coronar, esa montaña que has forjado con tu esfuerzo, con tu cariño, con tus sueños, con tus metas, con tu todo. ¿Y si todo fuera lo que no es? ¿Y si todo lo que sientes en ese momento sea algo bueno porque significa que luego volverás a estar en la cima de esa montaña? ¿Y si la vida es eso? Fracaso tras fracaso, y en medio, un poco de alegría.

lunes, 16 de enero de 2012

Nuestro futuro es nuestro.

No debemos dejar influenciarnos por otras personas ya que somos nosotros los que decidimos nuestra vida. No está mal que pidamos algún consejo a los demás; pero cuidado a quien se lo pedís, porque a veces la gente aparenta lo que no es, las personas engañan y hay momentos en los que quieres echar mano de ellos y tus “amigos” no están... Quiero decir que por mucho que digamos que no podemos elegir, siempre hay otra opción, siempre podemos elegir. Si estamos atados de pies y manos intentar soltarnos, intentar vivir nuestra propia vida, que nadie nos diga lo que tenemos que hacer, que nadie nos diga nuestro destino; que no dejemos que nadie se meta en nuestra vida sin permiso alguno.

martes, 10 de enero de 2012

Como si las estrellas pudiesen ser contadas.

Es como si las estrellas describiesen un destino; como si nos quisieran contar una historia; como si nuestra historia y nuestro camino quedan escritos allí, en el firmamento, suspendido en el cielo. Es como si nada más mirar el cielo en una noche de verano, pudiésemos leer lo que nos ha pasado, y lo que nos pasará.
Estoy segura de que esconden algo, un no se qué que te hace mirar más allá, detrás de la pared, detrás del cielo, detrás del tiempo. Como si todo lo demás no existiera. Como si solamente estaría tu vida volando por el cielo, libre, sin ataduras ni presiones, describiendo tu propio camino, eligiendo tu propio final.

jueves, 5 de enero de 2012

Un momento, una persona.

Puede que haya momentos en los que todo se desmorone, en los que nada de lo que pasa a tu alrededor te hace sentirte feliz, en los que parece que eres la única que lucha, o en los que parece que el cielo gris que está encima de tu cabeza se va a caer y a romper el suelo. En esos momentos malos, recuerda, que siempre habrá alguien a tu sombra, que siempre tendrás a esa persona que, por muy mal que vayan las cosas, te ha intentado apoyar, en la que en esos momentos desearías con todo tu corazón poder estar a su lado; en ese alguien a quien le confiarías la vida, en ese alguien en el que por mucho que lo intentas no dejas de pensar en ella, en esa persona que puede que lo signifique todo para ti; en esa persona que sientes algo tan grande por ella que no puedes explicarlo con palabras. Una sola persona en todo el planeta que te puede hacer llorar; pero también una sola persona en el planeta que puede consolarte.