viernes, 31 de octubre de 2014

Esos momentos en los que vas a estallar

Llevas tanto tiempo reprimiendo sentimientos, sensaciones, simplemente ideas en la cabeza... que llega un día en los que no puedes contenerlos más. Necesitas soltarlo todo y que lo que tenga que venir venga, porque sino te destruyen por dentro. 
A veces simplemente ordenando las ideas puedes llegar tú mismo a una conclusión. Otras necesitas escribirlas en un papel para empezar a ser objetivo o contárselas a la pared para que no pueda contestarte, aunque seguro que te sientes más libre y nadie te va a juzgar. En cambio, otras, necesitas a una persona que te escuche, que esté a tu lado para poder abrazarte, o simplemente para que te dé su opinión sobre el tema.
En los momentos en los que necesitas de otra persona, ya empiezas a depender, pero a veces lo mejor es contarlo todo y así poder apoyarte en alguien de confianza que sabes que va a mirar por tu bien, sin tener que juzgarte y sabiendo que va a estar a tu lado. Esos amigos que no se van nunca, esos que permanecen a tu lado pase lo que pase, que tu vida no sería igual sin ellos ya que han vivido contigo más que muchos momentos. Eso no quiere decir que haya algún amigo algo más especial, porque la base de una relación es la amistad de fondo, ya que sin confianza y sin complicidad no se puede construir nada, aunque lo intentes con todas tus fuerzas.
Gracias a todos los que están ahí, siempre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario